martes, 24 de enero de 2017

INTERPRETAR, de VIVIR y de IMAGINAR.

El que seamos optimistas o pesimistas, determina significativamente nuestra actitud ante la vida. Y en definitiva, es esa actitud personal la que da forma a nuestros resultados. Ultimamente he estado pensando bastante sobre este concepto de optimismo y pesimismo. Y personalmente, creo que una persona es optimista o pesimista en función de tres factores:
1.-El modo en que INTERPRETA su pasado.
2.-El modo en que VIVE su presente.
3.-El modo en que IMAGINA su futuro.
Esa es para mi la gran clave que marca toda la diferencia. El modo de INTERPRETAR, de VIVIR y de IMAGINAR.
¿Qué es el optimismo? Es la sana creencia de pensar que las cosas que han sucedido en nuestro pasado -independientemente de que hayan sido buenas, malas o regulares-, han sido positivas para nosotros. La persona optimista INTERPRETA su pasado de manera positiva a pesar de haber experimentado dificultades. Entiende esas dificultades como oportunidades de crecer y hacerse más fuerte.
La persona optimista VIVE el presente enfocándose en todo lo positivo que hay en su vida. Decide conscientemente fijar su atención en lo que está bien. Es como la historia que suelo contar en mis cursos de alguien que lleva una camisa blanca, en la que se ha hecho una mancha diminuta con un bolígrafo de color negro. El pesimista siempre enfocará en ese punto negro, a pesar de que el 99,99% de la camisa tiene un blanco inmaculado.
Y sobre todo, la persona optimista IMAGINA un futuro positivo. Piensa que las cosas van a salir bien. Se levanta cada día creando una expectativa positiva, anticipando en su imaginación un desenlace positivo para las cosas que emprenderá.
Piensa por un instante en tu propia forma de INTERPRETAR el pasado, de VIVIR el presente y de IMAGINAR el futuro. ¿Crees que eres una persona optimista o pesimista? En esos tres elementos descubrirás la clave para determinarlo, teniendo siempre presente que solo es necesario un instante y una decisión para comenzar a convertirte en un optimista redomado. Es tan sencillo como comenzar a interpretar tu pasado como lecciones que puedan servirte para mejorar, comenzar a vivir el presente enfocando en todo lo positivo que hay en tu vida, y comenzar a imaginar un futuro totalmente apasionante e inspirador.
Y como argumento final de por qué es importante convertirte en una persona tremendamente optimista, permíteme formularte una última pregunta:
¿Conoces a algún pesimista que sea feliz?
La respuesta está clara. La auténtica felicidad solo aparece cuando enfrentamos la vida desde una actitud de pleno optimismo.
Son innumerables las personas que viven su vida presas de una serie de miedos que les están impidiendo tomar acción, y como consecuencia jamás llegan a desatar su máximo potencial. Pero los miedos, en cualquiera de sus versiones, pueden ser vencidos en la mayoría de las ocasiones fruto de una simple decisión. La decisión de poner como una cualidad fundamental en la vida el CORAJE.
Como bien decía Sir Winston Churchill, “El coraje es la más importante cualidad humana, porque es la cualidad que garantiza todas las demás.”
Cuantas vidas se tornarían mucho más plenas fruto simplemente de esa decisión de poner el coraje como punto de referencia en nuestras vidas. Por supuesto que todos tenemos miedos, pero la gran diferencia reside en lo que haces respecto a ellos. Te animo a dar “EL PASO DEFINITIVO”. El paso que te permitirá destruir de una vez por todas todos esos miedos que te mantienen limitando tu potencial. Y todo lo que necesitas es una decisión sencilla pero comprometida. La decisión de poner el CORAJE como una de tus cualidades de referencia.
El simple hecho de tomar esa decisión, y dar ese paso, te abrirá nuevos horizontes de objetivos que ahora puede que te parezcan increíbles. Ese es el extraordinario poder del Coraje
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jueves, 19 de enero de 2017

Las tres claves


Cuenta una historia sobre un matrimonio que llevaba casi una década de casados, habían estado de novios por un par de años y al sentirse bien el uno con el otro decidieron que querían casarse y formar una familia...
El tiempo pasó, y como a veces ocurre en las parejas, la rutina fue erosionando la relación, ya no había tantos te amo como antes, ni muchos gestos de amor o cariño como al principio; los hijos, el trabajo, la familia, habían ganado más espacio, y eso de a poco, los había distanciado... Ya no estaban las flores para la fecha en que se habían conocido, tampoco los desayunos en la cama para dos... Algo había cambiado, y como fue tan lento ninguno de los dos lo había notado...
Una tarde al salir de su trabajo, y de camino a su auto, ella observó a una pareja muy mayor riendo en un banco de plaza, sin darse cuenta detuvo su marcha para observarlos... sus risas eran fuertes y parecían honestas... sus manos estaban tomadas, sus ojos no se apartaban del otro... Y ella pensó: que hermoso sería llegar a esa edad y seguir riendo como niños... se los veía felices, despreocupados del qué dirán...
Ella sonrió, subió a su auto y se marchó.
De camino a casa no podía borrar de su mente las imágenes que había observado... se preguntaba cuál sería la clave... sería el estar jubilados...?  el no tener que estar pensando en cuentas a pagar o las tareas escolares de los niños...? ¿Cuál sería la clave de esa felicidad...? Esa tarde al llegar a su casa la rutina la envolvió y las imágenes desaparecieron... los hijos, preparar la cena, una llamada de su madre, hicieron que volviera a su ”realidad”, el día continuó hasta llegar la noche y prepararse para descansar... mientras cepillaba su cabello pudo observar a su esposo ya en la cama, parecía cansado, su mirada estaba puesta en un punto fijo y no hablaba... en ese momento recordó las horas que pasaban conversando cuando recién se habían casado, él siempre se sentaba al borde de la cama para contarle su día mientras ella cepillaba su cabello... y ahora estaba tan lejos... ¿Qué había pasado...? ¿Qué les había pasado? En qué momento ese” momento” había desaparecido.
Se acostó y solo dijo buenas noches amor... pero no escuchó una respuesta.
A la mañana siguiente el desayuno fue igual... cada miembro de la familia concentrado en sus temas, el televisor prendido en los dibujitos, él leyendo el diario… y ella solo observando esa escena… que poco hablan, que poco se miraban… ¿qué habría pasado para llegar a estar “sin estar”…? El desayuno terminó, y como todos los días, cada uno partió a sus obligaciones… ella luego de dejar a sus hijos en el colegio prosiguió al trabajo… el día no fue normal, más allá de las tareas habituales su cabeza no dejaba de pensar en las imágenes de su casa, su esposo en la cama sin conversar, sus hijos en el desayuno cada uno en su tema… casi terminando el día, una pregunta se disparó en su mente… ¿es esto lo que soñaba para su vida? Y la respuesta fue una sola palabra…NO, ella soñaba con una familia unida, que se escuchara, que contara como había sido su día, ella soñaba con saber que querían sus hijos, como estaba su esposo, si su día había sido bueno o malo, ella soñaba con una vida diferente a la que estaba teniendo… la cual distaba mucho de la que tenía en ese momento… sentada en su escritorio dejó de escribir en su computador y pensó ¿Qué fue lo que hizo que hoy me diera cuenta de esto? ¿por qué no lo había visto antes?... y en ese momento recordó a los dos ancianos en el banco de la plaza… recordó sus miradas, sus risas, sus manos tomadas… ese había sido el disparador… ellos le habían mostrado como era su vida hoy… un poco de tristeza invadió su corazón, sintió que su sueño había desaparecido… sintió que todo lo hermoso que tenía y que deseaba se había esfumado… no fue su mejor tarde, estaba desconcentrada, se sentía desganada y no veía la hora que el reloj marcara las 5 para irse de la oficina… el tiempo transcurrió y la hora de irse llegó… saludó tímidamente a cada compañero con quien se cruzó y salió del edificio en búsqueda de su auto… su cabeza estaba gacha, como todo aquel que se da cuenta que el mundo es diferente al soñado… tan concentrada estaba en mirar el suelo que no notó que casi lleva por delante a una persona, en eso momento levantó su mirada y para su sorpresa casi había llevado por delante a la pareja de ancianos que había visto el día anterior, sobresaltada se disculpó, a lo que la pareja solo sonrió y dijo que no se preocupara, otra vez esas dos personas… nunca antes las había visto y ayer y hoy se las había cruzado… ¿sería una señal? ¿o solo coincidencia? Algo invadió su corazón… algo debía aprender de esa pareja, pero no sabía qué… en ese instante detuvo la marcha hacia su auto y decidió seguirlos, no quería asustarlos, ni que pensaran que los estaba por robar, así que se mantuvo a unos metros de distancia para ver que hacían… unos pocos metros más adelante notó que la mujer caminaba con su cabeza apoyada en los hombros del hombre, también notó que el hombre descansaba ligeramente su cabeza sobre ella… las cuadras iban pasando y ambos caminaban lento pero firmemente… unas cuadras adelante, y al llegar a un puesto de flores, el hombre detuvo la marcha, la miró y con una sonrisa pícara señaló las flores… ella también sonrió y con un gesto de complicidad dijo que sí… así fue que el señor pidió una rosa a la florista, pagó y mirando a la mujer a los ojos se la entregó… la mirada de la mujer era tierna, como esas miradas de amor puro y sincero, inclinó la cabeza, sonrió, acepto la flor… y luego lo besó.
Ella miraba la escena y no podía dejar de sentir admiración… y asombro… fue ahí cuando decidió acercarse y saludarlos.
-Buenas tardes, disculpen que los moleste, no quiero incomodarlos, pero necesito hacerles una pregunta…, la pareja la observó unos segundos, se miraron y contestaron que sí…
-Ayer los vi en el parque y hoy nuevamente los crucé de casualidad, no he podido dejar de observar cómo se tratan, ¿cómo se miran, ¿cómo caminan juntos, quería saber, ¿cómo lo hacen…?  la pareja de ancianos se miró y sonrieron…
- ¿Cómo hacemos qué? pregunto la mujer…
-Eso, respondió ella…
Los ancianos se miraron y le preguntaron si tenía unos minutos para conversar, ella pensando que recibiría una fórmula, asintió con su cabeza, así que los tres caminaron hasta un banco en la plaza lindera. Al sentarse el hombre le dijo: tenemos unas claves que descubrimos que son mágicas… ¿quiere saberlas?, sin poder responder ella solo asintió con la cabeza y se preparó para escuchar.
-          Bueno hija, primero le queremos contar que llevamos 49 años juntos, de los cuales hace 48 que estamos casados, hemos tenido malos momentos, hasta hubo un tiempo en el cual habíamos decidido separarnos, fue ahí donde, en lugar de alejarnos, decidimos darnos otra oportunidad... y en ese momento también, nos dimos cuenta que éramos diferentes… esa noche en nuestra casa, que es la misma en la cual vivimos hace más de 30 años, mientras conversábamos cómo resolver ;nuestras diferencias que encontramos la primer clave, éramos diferentes, y como éramos diferentes nuestros conflictos pasaban por querer cambiar al otro en lugar de aceptarlo, y eso era difícil aceptar al otro como un legítimo otro… por lo tanto decidimos que nuestra primera clave sería RESPETARNOS.

Ella no aguantó, y desde muy dentro suyo dijo…

-          ¿Qué significa eso? ¿Qué …tengo que soportar todo lo que no me gusta de él? eso sería dejar de ser yo!
-    Para nada, intervino la mujer, eso significa, que en lo que no coincidan deberán acordar, y para acordar deberán respetarse… y acordar es sencillo cuando existe respeto entre los dos… pero espere, aún faltan dos claves.
-  Otra cosa que hicimos, tomó la palabra, el anciano, fue establecer un decálogo…
- ¿Un decálogo? ¿Cómo es eso?
-    Es un listado de diez puntos que ambos respetaríamos a partir de decidirlo…. Y hoy tanto años después lo seguimos respetando…
-   No entiendo dijo ella, ¿es como un reglamento?
-  Algo así respondieron los ancianos, mirándose nuevamente con cara de cómplices.
-          ¿Y qué es lo que dice, o debería decir?
-          Cada pareja es única, dijo la mujer – cada pareja debería construir su propio decálogo según sus necesidades y acuerdos… si quiere le contamos el nuestro…

Ella se entusiasmó y pidió permiso para tomar nota… ambos ancianos asintieron con su cabeza, pero él dijo:

-          Cuidado, este es el nuestro, Ud. debería escribir junto a su pareja el suyo...
-          Sí, sí, lo entendí, pero quisiera saber cuál es el de Uds.
-          Muy bien, dijo él, tome nota… tenga en cuenta que ninguno es prioritario, podrían estar en cualquier lugar, pero deben estar, ¿se entiende? La mujer ya ansiosa por escuchar solo dijo; sí moviendo su cabeza...


1.      Nunca irnos a dormir enojados.
2.      Caminar siempre a la par, ni delante, ni detrás del otro.
3.      Respetarnos y cuidarnos, en esta secuencia, y jamás invertirla.
4.      Tener proyectos en común.
5.      Tener tiempo para compartir uno con el otro a solas.
6.      Preguntarnos como mínimo una vez por mes, ¿Cómo estamos? ¿cómo va nuestra relación?
7.      Respetar a sus familias y amigos.
8.      Apoyarnos mutuamente en nuestros proyectos.
9.      Ser leales, no mentirnos ni ocultarnos información.
1.     Nunca, pero nunca, pero nunca, caer en la rutina…

Ella terminó de escribir y trasladó esos puntos a su vida cotidiana… ¿hacía cuánto que no tenía tiempo a solas con su esposo? ¿Cuántas veces le había dicho que sus proyectos eran inviables en este país?... ¿qué proyecto tenían en común? ¿cuántas veces se habían acostado enojados… una enorme tristeza la invadió por dentro, y al leer el último punto se dio cuenta que su pareja estaba inmersa en la rutina…
Los ancianos la contemplaron en silencio por unos minutos… sabían que estaba sintiendo… la mujer, tomó el mentón y dijo:

-          ¿Qué pasa niña? ¿por qué esa cara?
-          Porque entiendo que mi vida es RUTINA, porque me estoy dando cuenta la cantidad de puntos que no cumplimos…
-          Alto, detente, dijo la anciana, tranquila, ese es nuestro decálogo, recuerda que deberías construir el tuyo, cada pareja es única y tiene necesidades diferentes…, por otro lado, en nuestro caso, lo construimos cuando casi parecía ser demasiado tarde… ¿es tu caso?
-          No lo sé, dijo la mujer mientras miraba a un punto fijo de la plaza
-          ¿Y si lo preguntas? Dijo el anciano, quizás no sea tan grave…
En ese momento la anciana posó su mano sobre la pierna de la mujer y dijo:

-          Ve y pregúntale, pídele, sí está de acuerdo que construyan el de Uds. vamos… no te quedes aquí con dos viejos en una plaza, tienes una vida por delante, no la desaproveches.

La mujer les sonrió, solo dijo gracias tomando muy fuerte las manos de la pareja y se preparó para irse… al comenzar a caminar y pensando en lo que había escuchado se dio cuenta que faltaba una clave… por lo que volteó y a la distancia preguntó:

-          Perdón ¿cuál es la última clave? A lo cual los ancianos respondieron al unísono
-          SENTIRNOS QUE MERECEMOS LAS COSAS LINDAS QUE NOS SUCEDEN JUNTOS Y CREERLO…

La vida es bella, muy bella, la vida vale la pena ser vivida, pero para poder hacerlo necesitamos saber qué queremos y qué no.
Si hoy tuvieras que escribir un decálogo con tu pareja… con tus hijos, con tus padres… ¿Qué diría?...

Muy buena semana
MCP José Luis López

PP

miércoles, 18 de enero de 2017

La Fórmula del Éxito

1. Definición de Metas: Definir exactamente y con precisión los resultados que se quieren conseguir, saber que se desea a partir de la puesta en práctica del conocimiento especializado.
2. Pasar a la acción: Es necesario llevar a la práctica acciones concretas para lograr los resultados que nos hemos planteado.
3. Desarrollar la agudeza sensorial: Es la revisión continua de las acciones, actitudes y hábitos que estamos ejecutando en relación a los resultados que estamos obteniendo, con el fin de determinar el grado de acercamiento o alejamiento a nuestro objetivo, bien sea por defecto o por exceso.
4. Flexibilidad: El factor anterior conlleva a la posibilidad de efectuar los ajustes necesarios para modificar el rumbo de nuestra conducta y estrategias en función de la consecución de nuestras metas.
Algunos factores potenciadores ya que sirven de impulso para hacer lo necesario para triunfar y son activadores básicos que pueden garantizar el éxito.
1. Pasión: Es la fuerza interior o impulso interno que mueve hacia la ejecución de acciones de una manera enérgica, para lograr las metas planteadas.
2. Fe: Tiene que ver con el poder de las creencias. Afirma que es nuestra fe en lo que somos y la certidumbre interna de alcanzar nuestras metas es lo que determina los resultados que obtendremos.
3. Estrategia: Los pasos, acciones y recursos específicos a utilizar para el logro de la meta.
4. Claridad de valores: Son determinantes los juicios de orden ético, moral y práctico que sustentan nuestra estructura personal, porque están relacionados con el sistema de creencias que sustenta nuestra visión del bien y del mal. Por lo tanto debe existir congruencia entre las metas que nos planteamos y nuestros valores.
5. Energía: Tiene que ver con la vitalidad que se necesita para actuar en el orden físico, intelectual y psicológico, a fin de aprovechar al máximo nuestras posibilidades y por ende, las oportunidades que se nos presenten.
6. Poder de adhesión: Posibilidad de conectar y establecer relaciones con las demás personas, lo que tiene que ver con la actitud para comunicarse con el entorno.
7. Maestría en las comunicaciones: Para lograr el triunfo es necesario comunicarnos de manera óptima, tanto interna como externamente.
Todos estos elementos están íntimamente relacionados y son parte de un sistema de apoyo básico para lograr el éxito.
Buena semana para todos.
MCP José Luis López

miércoles, 11 de enero de 2017

El nudo en la sábana

“En una Junta de padres de familia de cierta escuela, la Directora resaltaba el apoyo que los padres deben darle a los hijos.
También pedía que se hicieran presentes el máximo de tiempo posible.
Ella entendía que, aunque la mayoría de los padres de la comunidad fueran trabajadores, deberían encontrar un poco de tiempo para dedicar y entender a los niños.
Sin embargo, la directora se sorprendió cuando uno de los padres se levantó y explicó, en forma humilde, que él no tenía tiempo de hablar con su hijo durante la semana.
Cuando salía para trabajar era muy temprano y su hijo todavía estaba durmiendo.
Cuando regresaba del trabajo era muy tarde y el niño ya no estaba despierto.
Explicó, además, que tenía que trabajar de esa forma para proveer el sustento de la familia.
Dijo también que el no tener tiempo para su hijo lo angustiaba mucho e intentaba redimirse yendo a besarlo todas las noches cuando llegaba a su casa y, para que su hijo supiera de su presencia, él hacía un nudo en la punta de la sábana.
Eso sucedía religiosamente todas las noches cuando iba a besarlo.
Cuando el hijo despertaba y veía el nudo, sabía, a través de él, que su papá había estado allí y lo había besado. El nudo era el medio de comunicación entre ellos.
La directora se emocionó con aquella singular historia y se sorprendió aún más cuando constató que el hijo de ese padre, era uno de los mejores alumnos de la escuela.”
El hecho nos hace reflexionar sobre las muchas formas en que las personas pueden hacerse presentes y comunicarse con otros.
Aquél padre encontró su forma, que era simple pero eficiente. Y lo más importante es que su hijo percibía, a través del nudo afectivo, lo que su papá le estaba diciendo.
Algunas veces nos preocupamos tanto con la forma de decir las cosas que olvidamos lo principal que es la comunicación a través del sentimiento.
Simples detalles como un beso y un nudo en la punta de una sábana, significaban, para aquél hijo, muchísimo más que regalos o disculpas vacías.
Es válido que nos preocupemos por las personas pero es más importante que ellas lo sepan, que puedan sentirlo.
Para que exista la comunicación, es necesario que las personas “escuchen” el lenguaje de nuestro corazón, pues, en materia de afecto, los sentimientos siempre hablan más alto que las palabras.
Es por ese motivo que un beso, revestido del más puro afecto, cura el dolor de cabeza, el raspón en la rodilla, el miedo a la oscuridad.
Las personas tal vez no entiendan el significado de muchas palabras, pero saben registrar un gesto de amor. Aún y cuando el gesto sea solamente un nudo. Un nudo lleno de afecto y cariño.”

martes, 10 de enero de 2017

7 lecciones de superación

Las siete lecciones que aparecen a continuación son la destilación de algunos de los mejores materiales de superación de todos los tiempos. Constituyen algunas de las ideas de superación más poderosas que existen, y te invito a que reflexiones sobre cada una de ellas, porque su importancia es capital cuando se desea lograr una vida de auténtica realización y logro.
1.-Tu vida solo empezará a cambiar y a ser mejor cuando tu empieces a cambiar y a ser mejor.
Tu mundo exterior es un reflejo de tu mundo interior. Si deseas conseguir mayores resultados en tu mundo exterior, siempre has de comenzar primero trabajando en ti mismo. Tu eres la fuente de tus resultados. Son incontables las personas que pretenden cambiar su realidad sin querer cambiar nada ellas mismas. Y eso por descontado jamás sucede. Mejora y cambia tu primero, y verás como consecuencia como tus resultados en la vida comienzan a cambiar. Y como no existe límite sobre cuanto puedes mejorar, te darás cuenta de que tampoco existe límite sobre cuanto puedes conseguir.
2.-Dentro de cada problema o dificultad que experimentes, se haya la semilla de un beneficio equivalente o mayor.
Si empiezas a vivir los retos y problemas desde la perspectiva adecuada te darás cuenta de que contienen valiosas lecciones o indicaciones para hacerte mejor y más fuerte en el futuro. Empieza a buscar algo que puedas ganar en cada dificultad que se te presente, y lograrás generar un crecimiento personal de grandes proporciones.
3.-En la vida no importa tu punto de partida, lo que importa es hacia donde vas.
Jamás permitas que los acontecimientos de tu pasado, o tu situación actual pongan límites a cuanto puedes lograr. Aprende de tu pasado y de tu situación, pero déjalos ir. Aprende a enfocarte constantemente en el futuro y en la dirección de tus mayores sueños y aspiraciones. Y recuerda siempre que el único límite que tiene el futuro es tu propia imaginación, asi que comienza a soñar en grande.
4.-Los únicos límites de lo que eres capaz de lograr son los que aceptas en tu mente.
Como muy bien decía Henry Ford: "Tanto si crees que puedes hacerlo, como si no, en los dos casos tienes razón". ¡Que gran verdad contienen esas palabras! Aquellos que en su mente no ven factible una tarea, ¡ni tan siquiera la comienzan a hacer! Y por lo tanto jamás la lograrán. Todo logro comienza primero en la mente con un pensamiento de confianza en que lo podemos lograr. Conviértete en una persona de "posibilidades" Si puedes crearlo en tu mente, con tu esfuerzo persistente y la acción ¡puedes hacerlo!
5.-El dolor es inevitable, pero el sufrimiento siempre es opcional.
Todos vivimos momentos de dolor en nuestras vidas, pero hay quienes se recrean sufriendo ese dolor día tras día, mes tras mes y año tras año. Tu tienes la capacidad de soportar cualquier tipo de dolor que se te presente en la vida. Pero evita transformarlo en sufrimiento. Tienes la capacidad a través de tus elecciones y decisiones de determinar como te afectará cualquier experiencia dolorosa en tu vida. Elige siempre la respuesta positiva.
6.-Cualquier cosa que vale la pena hacerla bien, vale la pena hacerla mal al principio.
Esto que parece un juego de palabras, esconde una gran verdad. Para alcanzar maestría en algo, es necesario pasar por un proceso de aprendizaje. Miguel Ángel no pintó la Capilla Sixtina el primer día que cogió un pincel. Muchas personas no consiguen el éxito porque cuando comienzan algo y no les sale perfecto al primer intento, abandonan sus esfuerzos. No cometas ese error. Has de dar tiempo a tus habilidades para que empiecen a brillar con la grandeza de los maestros.
7.-Tu capacidad de aprendizaje es ilimitada. Eres capaz de aprender cualquier cosa que necesites para alcanzar cualquier objetivo que te propongas.
Si alguien ha alcanzado maestría en algo, tu también lo puedes hacer. Puedes aprender y dominar cualquier habilidad que sea necesaria para situarte en la cima de tu profesión si te lo propones. Simplemente hay que "pagar el precio" en esfuerzo que supone el lograrlo.
Comienza a aplicar estos siete principios en tu vida, y habrás logrado dar un paso de gigante en tu crecimiento personal y en el entendimiento de como funcionan las "leyes naturales" de la superación personal.
Recuerda: ¡La vida bien merece que hagamos de ella una obra maestra!
Existe una pregunta clave para determinar tu potencial de resultados en la vida. Esa pregunta es: ¿Cuáles son los pensamientos dominantes en tu mente la mayor parte del tiempo?
Si le haces esta pregunta a un gran realizador siempre obtendrás la misma respuesta. La gente de éxito piensa en aquello que quiere lograr y en como conseguirlo la mayor parte de su tiempo. Y como resultado de ese enfoque mental consiguen muchísimos más resultados que la persona promedio, en ocasiones incluso partiendo de situaciones de clara desventaja.
Por el contrario los perdedores pasan la mayor parte de su tiempo pensando y hablando sobre lo que no quieren. Piensan y hablan constantemente de los obstáculos que se encuentran en su camino, y de cada uno de los aspectos negativos que tienen en sus vidas. Malgastan una importantísima cantidad de energía lamentándose de que su vida no funciona, sin darse cuenta de que esa rutina mental de fracaso lo único que está haciendo es sumirles más y más en su mediocridad.
Investigaciones recientes han determinado que la cualidad predominante en la gente exitosa es el optimismo. Quienes logran grandes resultados suelen mantener una actitud mental positiva muy por encima de la media. Piensan en positivo la gran mayoría de su tiempo. Y eso es lo que marca la gran diferencia.
Tu nivel de optimismo frente a la vida es tu mejor baremo de lo feliz, sano y exitoso que serás. Cuanto más optimista y positivo seas, más energía y entusiasmo generarás. Tu sistema inmunitario será muchísimo más fuerte y resistente, y como consecuencia tus posibilidades de vivir una vida saludable se verán multiplicadas exponencialmente.
Determínate a convertirte en una persona OPTIMISTA con "mayúsculas". Crea expectativa positiva en tu vida. Actúa siempre esperando que lo mejor suceda. Trata de mantener tus pensamientos en positivo la mayor parte del tiempo, y no podrás creer la gran diferencia que eso supondrá en tu vida.
Porque como bien apuntaba hace ya muchísimos años James Allen, "La calidad de tu vida nunca será superior a la calidad de tus pensamientos".
Y para terminar, un reto extra que te animo a marcarte. No te limites a mantener tu mente en positivo, sino que te invito a que te transformes en un "inyector de positivismo" en los demás. Trasmite comentarios, ideas y palabras positivas a todos quienes entran en contacto contigo cada día. De este modo, habrás puesto tu granito de arena para que este mundo sea un mejor lugar en el que vivir.

sábado, 7 de enero de 2017

La importancia de cuidar y proteger a quienes queremos

Un hombre, su caballo y su perro caminaban por una calle. Después de mucho caminar, el hombre se dio cuenta que él, su caballo y su perro habían muerto en un accidente. La caminata era muy larga, cerro arriba, el sol estaba fuerte y ellos estaban transpirados y con mucha sed. Necesitaban desesperadamente agua.
En una curva del camino divisaron un portón magnífico, todo de mármol que conducía a una plaza pavimentada con bloques de oro, en el centro de ella había una fuente de donde emanaba agua cristalina. El caminante se dirigió al hombre que en una garita custodiaba la entrada.

– Buen día.
– Buen día – respondió el hombre.
– ¿Qué lugar es este tan lindo? – preguntó.
– Esto es el Cielo – fue la respuesta.
– ¡Qué bueno que llegamos al Cielo! Estamos con mucha sed – dice el hombre.
– Puede entrar a beber agua cuando quiera – dijo el guardia -indicando la fuente.
– Mi caballo y mi perro también están sedientos.
– Lo lamento- dijo el guarda- Aquí no se permite la entrada de animales.

El hombre quedó desconcertado, pues su sed era grande. Pero él no estaba dispuesto a beber dejando a sus amigos con sed. Así que prosiguió su camino. Después de mucho caminar cerro arriba, con la sed y el cansancio multiplicados, llegaron a un sitio cuya entrada estaba señalada por una puerta vieja semiabierta. La puerta conducía a un camino de tierra, con árboles a ambos lados haciendo sombra. A la sombra de uno de los árboles había un hombre acostado.
-Buen día, dijo el caminante.-Buen día, dijo el hombre.
-Estamos con mucha sed yo, mi caballo y mi perro.
-Hay una fuente entre aquellas piedras -dijo el hombre-. Pueden beber cuanto quieran.

El hombre, el caballo y el perro fueron hasta la fuente y saciaron su sed.
-Muchas gracias- dijo al salir.
-Vuelvan cuando quieran- dijo el hombre.
-A propósito, dijo el caminante, ¿cuál es el nombre de este lugar?
-El Cielo- respondió el hombre.
-¿Cielo? Pero si el hombre de la garita de más abajo, al lado del portón de mármol, dijo que ese era el Cielo.
–Aquello no es el Cielo, eso es el Infierno.
-Pero entonces- dijo el caminante- esa información falsa debe causar grandes confusiones.
-De ninguna manera- respondió el hombre.
-En realidad, ellos nos hacen un gran favor porque allá quedan las personas que son capaces de abandonar a sus mejores amigos.

Moraleja... cuando solo pensamos en nosotros, y no en quienes nos acompañan, inclusive en los peores momentos... entramos en el infierno llamado EGOISMO...
Pensá en vos, valorate, no hagas nada que no quieras, pero también no te olvides de quienes te aman...
Que tengan un hermoso fin de semana
MCP José Luis López